Honestamente, si te preguntara cómo te va en el trabajo ¿Qué me responderías? El estrés laboral a menudo se entrelaza con la vida personal, por lo que reconocer y priorizar el bienestar mental en el trabajo es esencial. Por más competentes y capaces que
seamos, simplemente hay días tan pesados que ni las seis tazas de café, ni el internet a toda velocidad, ni nuestro mejor trajecito chambeador nos ayuda a no querer explotar en la oficina.

Es por eso que la salud mental en el trabajo es esencial. Vamos a explorar algunas ideas de cómo deberíamos tomar este tema en el mundo corporativo:

1. Concienciación y reducción del estigma: fomentar un ambiente donde los empleados se sientan cómodos al hablar sobre su salud mental y eliminar el estigma asociado a los trastornos mentales.

2. Programas de bienestar: ofrecer programas de bienestar que incluyan actividades como ejercicio, meditación y consejería para ayudar a los empleados a gestionar el estrés y promover un equilibrio entre el trabajo y la vida personal.

3. Ambiente de trabajo saludable: diseñar espacios de trabajo que promuevan la productividad y reduzcan el estrés, incluyendo la luz natural, áreas de descanso y la posibilidad de personalizar el entorno.

4. Gestión de la carga de trabajo: evitar la sobrecarga de trabajo y asegurar una distribución equitativa de las responsabilidades para prevenir el agotamiento.

5. Apoyo de la alta dirección: los líderes deben demostrar interés y compromiso con la salud mental de los colaboradores, lo que incluye políticas de apoyo y recursos adecuados.

6. Formación en salud mental: proporcionar capacitación a los empleados y a los gerentes para que puedan reconocer signos de problemas de salud mental y cómo brindar apoyo.

7. Acceso a recursos de salud mental: ofrecer acceso fácil y confidencial a servicios de salud mental, como psiquiatría, asesoramiento y terapia.

8. Políticas de flexibilidad: permitir horarios flexibles, trabajo desde casa y opciones de licencia para acomodarse con las necesidades de los empleados.

9. Comunicación abierta: fomentar la comunicación abierta y la retroalimentación constante entre los empleados y la dirección.

10. Prevención del acoso laboral: implementar políticas y procedimientos efectivos para prevenir y abordar el acoso en el lugar de trabajo.

Esto es tan solo la puntita del iceberg en cuanto a este tema. La gran mayoría de áreas de trabajo no tienen atención y tienen muy poco (si no es que nulo) conocimiento sobre la salud mental de sus colaboradores, porque se sigue pensando erróneamente que la ausencia de salud mental es estar loco (?) y nos resta productividad o nos impide trabajar adecuadamente. Cuando en realidad, abordar las necesidades de salud mental en los lugares de trabajo no es solo un acto humano y de empatía, sino una estrategia de inversión para el éxito de una empresa a corto y largo plazo.

¡Empieza esta cadena contigo, ya seas empresa o trabajador, comparte estas ideas, lleva a cabo lo que puedas y de poquito en poquito impulsemos una buena cultura de salud mental en el trabajo!

Abrazo chambeador,

Carmen.